13. La Exteriorizaci�n de la Jerarqu�a
El fatalista autom�ticamente se resigna a lo que pueda pasarle, no viendo, en los efectos que la causa es atribuible a su propia acci�n, o inacci�n; pero resignado siempre a un inexorable destino. La contraparte cristiana tiende a aceptar lo que le toca como viniendo de la Voluntad de Dios, en la que no tiene arte ni parte. Al otro extremo est� el rebelde independiente, decidido a ejecutar su derecho en un acto de libre albedr�o. Este libro, como uno de sus muchos valores, muestra a qu� extremo, la Jerarqu�a y otros centros de vida en el planeta, dependen del impredecible, y a menudo irresponsable libre albedr�o humano. Durante los a�os anteriores al estallido de la segunda Guerra Mundial, se le ofreci� a la humanidad toda la oportunidad y todo el est�mulo espiritual posible en un esfuerzo por evitar que el conflicto se precipitara en el plano f�sico. Se le pidi� a los disc�pulos y aspirantes al discipulado especial cooperaci�n con la Jerarqu�a, y para hacer un acrecentado esfuerzo para proveer un adecuado liderazgo al pensamiento y decisi�n humanos. Sin embargo todos tuvieron la libertad de determinar sus propios l�mites y decidir las acciones a tomar. De acuerdo a la ley, la Jerarqu�a, a�n en el punto de peligro, no puede infringir el libre albedr�o humano y dictar o imponer un curso de acci�n basado en su propio y m�s profundo discernimiento, y conocimiento. Muchos de los factores espirituales que rodearon el per�odo de la historia humana desde 1919 hasta 1949, se presentan en este libro. Se muestran las energ�as que trabajaban detr�s de la escena y se revela la identidad de ciertos grandes seres atra�dos magn�ticamente al servicio en este planeta en un momento culminante de la evoluci�n de nuestra vida planetaria. Estos factores son una ayuda para nuestro entendimiento de los patrones de energ�a interrelacionadas dentro del universo que opera de acuerdo con la ley. Pero esencialmente proveen al esoterista el conocimiento del flujo de energ�a disponible, que responde al Plan y prop�sito planetarios que puede ser contactado entrando en cooperaci�n inteligente y consciente, particularmente por parte de aqu�llos en los que la voluntad ego�sta y autocentrada ha sido trascendida de modo que se le puede dar expresi�n m�s adecuada a la voluntad espiritual. Algunos de estos factores de energ�a son particularmente claros en los "Mensajes" dados durante un per�odo de muchos a�os en ocasi�n de los Festivales de Pascua, Wesak y del Cristo. Muchos aspectos del trabajo jer�rquico, su pensamiento y planeamiento se discuten en estos mensajes, mostrando el efecto jer�rquico de la evoluci�n planetaria e iniciaci�n y su reflejo en la humanidad. Esto lleg� a su cl�max durante los tres festivales de 1945, cuando se tom� una decisi�n trascendental referente a la exteriorizaci�n de la Jerarqu�a y la reaparici�n de Cristo. La secci�n final del libro trata sobre las "etapas de la exteriorizaci�n de la Jerarqu�a". Es a menudo dif�cil para la mente humana imaginar los problemas que enfrentan aquellos seres liberados de las restricciones de la forma. Es a�n m�s dif�cil contemplar los efectos que causa en aquellos as� liberados el tener que reasumir, por libre elecci�n, semejante limitaci�n.
De esta manera se nos ayuda a entender lo que la interdependencia
realmente significa en la vida de este planeta, en t�rminos de amor,
sacrificio y servicio de la parte en beneficio de las necesidades del
todo. * Publicado por: Editorial Fundaci�n Lucis - Buenos Aires - Argentina * Precio sugerido en Pesos Argentinos: $ 56.- (Act. Mayo 2007)*
P�ginas: 576 �NDICE DEL LIBRO
SEGUNDA PARTE SITUACI�N GENERAL DEL MUNDO
TERCERA PARTE LAS FUERZAS DETR�S DEL PROCESO EVOLUTIVO DE LA RAZA
CUARTA PARTE ETAPAS DE LA EXTERIORIZACI�N DE LA JERARQU�A
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