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      [
      Plenilunio
      de Capricornio 
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      Martes
      2 de Enero de 2018 - 02:24 hs am GMT
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      Nota clave:
      "Estoy
      perdido en la Luz Suprema y a esa Luz doy la espalda"
      
      El Festival de
      Capricornio proporciona el tema y punto de atenci�n para nuestra meditaci�n
      de Luna Llena de este mes. Se dice de Capricornio que es una de las
      fuerzas m�s dif�ciles de comprender porque es el m�s misterioso de los
      doce signos. Puede que ello sea porque el verdadero Capricornio puede
      actuar en cualquiera de los dos extremos de conciencia: el del
      materialismo m�s denso o el de la percepci�n iluminada del iniciado.
      
      
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      Capricornio ofrece una imagen bastante completa de la
      humanidad con sus pies en la Tierra y, sin embargo, corriendo libremente
      y subiendo a las cimas de la ambici�n mundana o de la aspiraci�n
      espiritual en b�squeda de aquello que se percibe como principal
      necesidad. Como carnero, es el ser humano terrenal, el codicioso buscador
      de la satisfacci�n del deseo, o el aspirante, el buscador igualmente ego�sta
      a la caza de la satisfacci�n de su aspiraci�n.
      
      
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      La definici�n m�s apta
      es que el ser humano es "un animal m�s un Dios vivo en la forma f�sica".
      La energ�a de Capricornio parece representar, en su estimulaci�n, �stos
      dos aspectos de la constituci�n humana. Todav�a enfocado en la
      naturaleza material se encuentra un ambicioso animal, luchando por sus
      propios intereses ego�stas, preparado para llegar tan lejos como sea
      necesario para satisfacer sus necesidades y deseos. Los aspirantes al
      discipulado que se encuentran bajo esta misma influencia est�n espoleados
      e inspirados en su ascensi�n, saliendo de las profundidades de la vida
      controlada por la forma hacia la luz y la gloria de la experiencia de la
      cima de la monta�a, o iniciaci�n.
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      Por lo tanto,
      dependiendo de donde se encuentre un individuo en el sendero de evoluci�n,
      Capricornio estimular� todo cu�nto sea material, o centrado en la forma,
      o todo cu�nto sea espiritual. En Capricornio estamos ante el triunfo de
      la materia, que alcanza su expresi�n m�s concreta y densa; pero este
      triunfo es seguido por el del esp�ritu. En Capricornio se encuentra la
      plena expresi�n de la naturaleza terrenal, pero tambi�n se encuentran
      inmensas posibilidades espirituales.
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      Capricornio es un signo de conclusi�n
      puesto que representa las profundidades de la degradaci�n o de la
      cristalizaci�n y las cimas del logro espiritual: los dos polos de toda la
      experiencia humana. Tambi�n es el signo de los nuevos comienzos, puesto
      que cada final es s�lo la conclusi�n de una fase o ciclo, y cada logro
      es un paso hacia el crecimiento.
      
      
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      Capricornio inaugura un
      nuevo ciclo de esfuerzo. La situaci�n actual del mundo indica que la
      humanidad se encuentra en ese estado de agitaci�n previo a realizar un
      avance decisivo en el desarrollo de la autoconciencia. El siguiente paso
      implica la expresi�n del sentido de la responsabilidad, que es la primera
      flor y fruto de la percepci�n autoconsciente, una primera indicaci�n de
      que el alma est� haciendo sentir su presencia. El conflicto actual se
      debe al enfrentamiento entre el crecimiento espiritual, en todos los
      niveles de percepci�n humana, y la resistencia de las fuerzas
      impenitentes de la personalidad y a la batalla que est� libr�ndose entre
      las fuerzas del materialismo atrincheradas en la forma humana y las
      fuerzas de la Luz trabajando a trav�s de la Jerarqu�a espiritual de Luz
      y Amor. Esto es similar a la batalla final en el individuo entre la
      personalidad, el Morador en el Umbral, y el alma, el �ngel de la
      Presencia.
      
      
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      Capricornio guarda el
      secreto del alma, el secreto de la gloria oculta, revelado al disc�pulo
      en el punto culminante de la tercera iniciaci�n, la transfiguraci�n de
      la personalidad por el alma en la cima de la monta�a. Pero esta revelaci�n
      s�lo puede tener lugar como resultado del esfuerzo, de la capacidad de
      elevarse por encima de las limitaciones de la personalidad, de persistir
      en el camino de ascensi�n a pesar de los obst�culos y las dificultades.
      No existe un camino f�cil para que los individuos se liberen de sus
      propias limitaciones del ego�smo y la separatividad; y no existen los
      atajos. Es un largo, doloroso proceso en el que aprendemos, eventualmente,
      mediante la experiencia personal, que la autodisciplina y el autocontrol y
      el autosacrificio forman las piedras fundamentales del discipulado.
      
      
			
			
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				Sobre estos cimientos
      puede eventualmente desarrollarse la superestructura de una forma de vida
      amorosa y responsable, que refleje los valores del alma. Este crecimiento
      de conciencia se convierte en el camino de iniciaci�n, el camino hacia la
      cima de la monta�a, hacia esa luz suprema que revela al alma como el
      verdadero Ser, al Plan como la responsabilidad del discipulado y a la
      Jerarqu�a espiritual del planeta como el centro de amor donde, a trav�s
      de la iniciaci�n, se admite al disc�pulo aceptado.
      
      
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      Capricornio es, por
      tanto, el signo destacado de la iniciaci�n. Seg�n los antiguos mitos y
      leyendas, todo dios-sol nace en este signo. (Un dios-sol es aquel cuya
      tarea es revelar alg�n aspecto del principio del alma: amor, luz y
      voluntad c�smicos.) La cumbre de la experiencia puramente humana, la
      tercera iniciaci�n de Transfiguraci�n, est� regida por Capricornio. En
      ella el alma revela su belleza, verdad y bondad en la conciencia del disc�pulo,
      confirmando su logro y estableciendo el camino por delante. Mart�n Luther
      King habl� de haber estado en la cima de la monta�a y haber contemplado
      la "tierra prometida". Se refer�a a la promesa que el alma
      extiende a toda vida humana. La superaci�n de las limitaciones personales
      y las barreras impuestas por las circunstancias s�lo son posibles a la
      luz de un estado de conciencia m�s elevado e inclusivo.
      
      
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      Para todos los disc�pulos,
      el camino hasta la tercera iniciaci�n, incluida, es el camino del
      servicio entre los "hijos de los hombres", todav�a sufriendo en
      los planos y valles de la experiencia humana. Los iniciados dejan atr�s
      la experiencia en la cima de la monta�a, vuelven sus rostros hacia el
      campo de servicio y enfocan toda su atenci�n y energ�as en satisfacer la
      necesidad del reino humano.
      
      
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      La nota clave del disc�pulo
      en Capricornio es elocuente respecto a toda esta experiencia: "Estoy
      perdido en la luz suprema y a esa luz doy la espalda". 0, en palabras
      de la nota clave de nuestro trabajo de meditaci�n de Luna Llena, el disc�pulo
      "gira sobre el pedestal de luz y se vuelve en direcci�n opuesta.
      Vuelve su rostro hacia la oscuridad y, entonces, los siete puntos de luz
      dentro de s� mismo transmiten la luz que irradia hacia el exterior y, he
      aqu� que los rostros de los que hollan el sendero oscuro reciben esa luz.
      Para ellos ya el camino no est� oscuro. Detr�s de los guerreros, entre
      la luz y la oscuridad, resplandece la Luz de la Jerarqu�a.
      
      
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      Recojamos
      estos inspiradores pensamientos en nuestras conciencias meditativas
      mientras intentamos cooperar con la oportunidad de servicio que
      proporciona este Festival de Capricornio, concluyendo con la Gran Invocaci�n.
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      �LA
      GRAN INVOCACI�N�
      
      
      Desde el punto de Luz en la Mente de Dios,
      Que afluya luz a las mentes de los hombres;
      Que la Luz descienda a la Tierra.
      
      Desde el punto de Amor en el Coraz�n de Dios,
      Que afluya amor a los corazones de los hombres;
      Que Cristo retorne a la Tierra.
      
      Desde el centro donde la Voluntad de Dios es conocida,
      Que el prop�sito gu�e a las peque�as voluntades de los hombres;
      El prop�sito que los Maestros conocen y sirven.
      
      Desde el centro que llamamos la raza de los hombres,
      Que se realice el Plan de Amor y de Luz
      Y selle la puerta donde se halla el mal.
      
      Que la Luz, el Amor y el Poder restablezcan el Plan en la Tierra.
      
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      "Los
      doce festivales anuales constituir�n una revelaci�n de la Divinidad"
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      Alice
      A. Bailey
      
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      � Para profundizar este tema descargue
      aqu� y ahora:����
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		�Capricornio - Astrolog�a Esot�rica por 
		E. G.
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